Aunque las últimas encuestas le dan la victoria a la ultraderecha no tendrá mayoría absoluta para gobernar por sí misma.

La campaña electoral en Francia concluyó este viernes y dará paso a partir de medianoche (UTC) a una etapa de reflexión electoral para que los votantes ejerzan el sufragio el próximo domingo 7 de julio.

A la cabeza de las elecciones, según los primeros resultados de la primera vuelta, apuntan a la ultraderecha que, con Marine Le Pen al frente, obtuvo un “33,15 por ciento de los votos, junto a sus aliados conservadores”.

Aumenta violencia política en Francia durante cierre de campaña electoral

Mientras que la coalición de izquierda del Nuevo Frente Popular (NFP) obtuvo el 27,99 por ciento de los votos, posicionándose así como la segunda fuerza política.

No obstante, aunque las últimas encuestas en Francia le dan la victoria a la ultraderecha francesa, esta ala política no tendrá mayoría para gobernar, según la multinacional de investigación de mercados y consultoría Ipsos.

Esto, debido a que Le Pen, junto a su candidato a primer ministro, Jordan Bardella han puesto como condición el triunfo con mayoría absoluta, que en cifras eso equivale a 289 escaños. Ello sería el paso que le posibilitaría la formación de  Gobierno.

Por otro lado, en esta segunda  vuelta la ultraderecha  sus asociados van a la batalla de  485 circunscripciones, de 577, lo que representa aproximadamente un 84 por ciento.

En tanto, la izquierda logró que sus candidatos clasifiquen para segunda vuelta en 446 circunscripciones, sin embargo primera posición solo han logrado 157 de ellas, lo que deja la desventaja más que clara.

El ala política que representa al macronismo “podrá disputar 319 circunscripciones en la segunda vuelta, pero sólo estaba en primera posición en 69 de ellas”, subrayan las encuestadoras.

En consecuencia, la izquierda informó que se eliminarán  “sistemáticamente” a los candidatos que se ubicaran en tercera posición.

Alrededor de todas estas discordias, el ministro de de Interior, Gérald Darmanin, declaró este viernes que se produjeron más de 50 agresiones a candidatos o militantes durante la campaña electoral de la segunda vuelta de las elecciones legislativas, prevista para el domingo 7 de julio.

Siguiendo esta línea, el funcionario en declaraciones a la prensa se mostró preocupado por la ocurrencia de más disturbios cuando el próximo domingo se conozcan los resultados de los comicios.

Para hacer frente al violento panorama, el político subrayó que se pondrán en alarma 30.000 policías, de los cuales 5000 permanecerán en París el tiempo que sea necesario.

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